PRESENTACIÓN DEL NIÑO AL TEMPLO

Es una tradición muy antigua que la Iglesia aun conserva, es presentar a los hijos al Señor para que reciban  la bendición y a igual que Jesús crezcan en sabiduría, bondad ante Dios y los hombres

El texto bíblico nos narra:  “Y cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos, conforme a la ley de Moisés, le trajeron a Jerusalén para presentarle al Señor Después de haber cumplido con todo lo prescrito en la ley del Señor, volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. Y el niño crecía y se fortalecía, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios era sobre él”.  (Lucas 2, 21-22.39-40)

Es lo que los padres de las alumnas de 1ª Bàsico A y B quisieron de alguna manera replicar en sus hijas: Presentarlas al templo.

La alumnas fueron bendecidas por el Padre Pedro, fue una ceremonia sencilla pero muy significativa.  Los padres estaban muy felices y agradecido de los que se había preparado para sus hijas.